Este Lunes Santo en las afueras de la Iglesia San Francisco de Asís, la Alcaldía Municipal de León y el Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur) repartieron a las y los leoneses la tradicional chicha de maíz negro, en honor a la celebración del Día de San Benito de Palermo.

Es una tradición que data de más de 200 años en donde a los visitantes y los promesantes vestidos del traje de luz (cotona y gorro blanco) después de asistir a misa en la Iglesia San Francisco se les entrega esta bebida ancestral.

La Alcaldesa de León, Compañera Guissela Lacayo, expresó que esta es una de las devociones más hermosa que se tienen en León.

“Es hermoso ver cómo la ciudadanía se desborda a participar de esta hermosa devoción que tiene más de 200 años en nuestra ciudad”, refirió la edil.

“Y es parte de la promoción que ha hecho nuestro Gobierno revolucionario a través del Intur, la Alcaldía Municipal, venimos a repartir 20 barriles de chicha cada año y cada uno de los barriles tiene su mecanismo de entrega”, añadió.

Con la repartición de esta chicha de maíz negro preparada cien por ciento natural y la devoción a San Benito en León inician la Semana Santa.

De esta devoción son partícipes también algunas personas de los municipios de León y otros departamentos, incluso fuera del país.

“Vienen a participar y a vivir de esta hermosa devoción, de compartir en familia ese amor a lo que es la solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo en todas sus advocaciones y sobre todo ese amor a lo espiritual, a la paz, a la reconciliación, a lo que es la devoción religiosa de nuestro pueblo de León”, remarcó Lacayo.

Con esta edición ya son 14 años que el Buen Gobierno acompaña a estas instituciones para la repartidera.

“Siempre el objetivo es promover las tradiciones y como León es una ciudad religiosa y cultural, pues nos damos a la tarea de realizar estos 20 barriles de chicha”, dijo Teresa Ramírez, delegada del Intur en León.

Doña Rosa Sánchez es una de las promesantes que junto con su hijo en silla de rueda, una vez concluyó la misa pasó por su vaso de chicha.

“Siempre he participado porque me gusta y por favores que he recibido, porque tuve un hijo que se estaba ahogando porque él es salvavidas de la Cruz Roja y él le pidió el favor a San Benito que lo ayudara a salir con la paciente que traía y cuando él se vio ya estaba en la arena”, compartió.

Otro promesante que hacía fila para recibir su chicha de maíz fue don Hipólito Huerta, de la comarca Lechecuagos.

“Todos los años tenemos la devoción para pedir la chichita, y uno tiene que tener la fe hasta morir, hasta que Dios diga”, indicó.

¿Cómo se prepara la chicha de maíz negro?

Doña Francisca Pérez Sánchez, nativa del barrio Sutiaba, tiene más de 50 años de elaborar esta chicha y explicó su preparación.

“Primera se zarandea el maíz, se le quita la basura, se lava bien por la mañana y se deja remojando dos días, hasta que salen las raíces, luego se saca y después se pone a calentar en el sol para que sople y dé el punto, luego se pone a cocer, a la hora y media ya está esa chicha”, dijo la protagonista.

Pérez es muy conocida en León por ese toque único que le da a la masa de esta bebida natural y a la que le gusta a la gente por su sabor.

“Es muy apetecida esta chicha, por el sabor que da, un sabor rico, si usted la quiere fuerte, usted la pone como la chicha ácida y si la quiere tierna es más sabrosa”, aseveró.

Por lo general esta protagonista diariamente dijo cocinar 4 quintales de maíz, sin embargo para este año preparó 13 quintales.

En Sutiaba, su vivienda es conocida como La Casa del Tiste, porque también venden la masa para hacer esta bebida típica, pinolillo, cereal, pozol, cacao, semilla de jícaro y cereal.

La protagonista manifestó que su producto lo vende en casa, en el mercado de la Estación Santos Bárcenas y en Estelí, desde los 5 córdobas.

En este emprendimiento se trabaja en familia, doña Francisca mencionó que tiene con ella 5 hijos que la apoyan.